¿Es útil el aceite de coco en la dermatitis atópica?

Cada vez nos encontramos con más pacientes que utilizan terapias naturales en las consultas…. una de ellas es el aceite de coco sobretodo para hidratar pieles atópicas, pero ¿se han estudiado sus beneficios? ¡En este post os lo contamos!

La dermatitis atópica (DA) es una enfermedad inflamatoria crónica muy frecuente, y aunque suele mejorar con la edad, no tiene una cura definitiva. Normalmente el pilar fundamental del tratamiento son los emolientes y la utilización de antiinflamatorios se reserva para las exacerbaciones/brotes.

A pesar de que tenemos al alcance diferentes productos específicos para su cuidado (syndets, sin perfumes….) y varios tratamientos médicos para hacer frente a esta patología, son muchos los pacientes que optan por medicinas alternativas o complementarias para el manejo de esta enfermedad. Y es que como ya os contamos con anterioridad, durante los últimos años ha existido un incremento importante de la demanda y el uso de productos naturales.

Este auge se debe probablemente al rechazo de los productos “químicos” y al continuo bombardeo de información sobre sus efectos nocivos, no siempre justificado. En la DA en concreto suele existir “corticofobia”, es decir, miedo al uso de corticoides, los cuales utilizados de forma adecuada son seguros y eficaces. Además de todo esto, también hay que añadir al impacto de esta enfermedad los costes derivados de “los productos específicos” (cremas o productos de higiene)  y la búsqueda de alternativas más económicas.

¿Qué contiene el aceite de coco y que propiedades se le atribuyen?

El aceite de coco tienen numerosos usos, siendo el comestible el más conocido, y habiéndosele atribuido a sus ácidos grasos esenciales efectos positivos para la salud, aunque no milagrosos. Además de ingerido, el aceite de coco ha sido también estudiado aplicándolo de forma tópica en la piel con resultados favorables.

Este aceite se extrae del grano de los cocos maduros recolectados de la palma de coco, y dan dos variedades: el aceite de copra (pulpa seca) y aceite de coco virgen (se tiene que purificar y refinar). Este último, el aceite de coco virgen, es rico en ácido laúrico, ácido caprílico y ácido mirístico, ácidos grasos con propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas, mejorando la función barrera de la piel.

¿Qué beneficios tiene el aceite de coco en la dermatitis atópica?

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Este aceite como hemos comentado tiene propiedades emolientes, antibacterianas y antioxidantes, de forma que puede ayudar a reducir la inflamación, calmar el picor,  hidratar la piel y prevenir las infecciones en pacientes con DA.

De hecho algunos estudios han demostrado en este sentido que el aceite de coco virgen podría mejorar esta enfermedad, mejorando el SCORAD (escala que mide la gravedad de la enfermedad) y  disminuyendo la pérdida de agua transepidérmica (los pacientes con DA tienen la barrera cutánea alterada y una mayor pérdida de agua transepidérmica).

¿Se han estudiado otros aceites para la dermatitis atópica?

Sí, se han estudiado otros aceites en la DA y no todos han obtenido los mismos resultados. Por ejemplo, algunos estudios han publicado que el aceite de oliva aplicado de forma tópica puede empeorar la sequedad y el eccema. Parece que uno de sus componentes principales, el ácido oleico, podría dañar la piel induciendo inflamación a través de un receptor de las queratinocitos y favoreciendo la separación de los lípidos, haciendo más fácil la penetración de infecciones y alérgenos.

Por otra parte, el aceite de girasol aplicado de forma tópica  parece  tener aspectos positivos en la piel. Su principal componente el ácido linoleico es necesario para mantener una buena función de la barrera cutánea, por tanto se ha postulado que la aplicación de este ácido contenido en el aceite de girasol, podría reducir la inflamación.

No obstante, los estudios que hay son pocos y hacen falta evidencias más fundadas para dar recomendaciones concretas. Además no debemos olvidar que sus componentes nos pueden irritar la piel o nos podemos sensibilizar a alguno de sus componentes, por tanto, tenemos que recordar el riesgo de dermatitis de contacto alérgica o irritativa que pueden tener este tipo de productos, no exentos de ello por ser naturales.

¿Entonces podemos utilizar el aceite de coco como adyuvante al tratamiento en la DA?

Aunque el tratamiento del eccema atópico siempre debe ir encaminado a tratar el eccema con antiinflamatorios, los hidrantes y cuidados emolientes siempre son un pilar fundamental del tratamiento, acompañando al brote y de forma mantenida entre brotes.

En concreto, con el aceite de coco, si parecen haber datos a favor de su uso, posicionándose como una buena alternativa por sus propiedades emolientes y antibacterianas, además de su disponibilidad y seguridad. Sin embargo todavía hacen falta más estudios en este ámbito, ya que los datos no son concluyentes para dar unas  recomendaciones definitivas.

Buen día 

Dra. Berbegal

 

Bibliografía

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